Un fármaco usado para tratar la diabetes tipo 2, podría ser la solución para la demencia adulta
Recientemente, un estudio realizado en Corea del Sur ha dado resultados muy interesantes sobre la relación entre la diabetes tipo 2 y la demencia. Al parecer, ciertos medicamentos que se usan para tratar la diabetes no solo ayudan a controlar el azúcar en la sangre, sino que también pueden reducir el riesgo de desarrollar demencia. En este estudio participaron más de 110,000 personas con diabetes tipo 2, y los investigadores compararon a quienes tomaban dos tipos de medicamentos: los inhibidores SGLT-2 y los inhibidores DPP-4. Lo sorprendente fue que aquellos que usaban inhibidores SGLT-2 tenían un 35% menos de probabilidades de desarrollar demencia que los que tomaban el otro medicamento.
La diabetes siempre ha sido vista como un factor que aumenta el riesgo de desarrollar demencia, especialmente en formas comunes como el Alzheimer o la demencia vascular. Así que, de alguna manera, no es raro pensar que si tratamos bien la diabetes, también podríamos estar ayudando a prevenir problemas de memoria y deterioro cognitivo en el futuro. Pero lo interesante aquí es por qué un medicamento parece funcionar mejor que otro.
¿Cómo se relacionan la diabetes y la demencia?
Primero, es básico que sepas entender cómo funciona la insulina, que es una hormona que regula el azúcar en la sangre. En las personas con diabetes tipo 2, ya sea que el cuerpo no produce suficiente insulina o que las células no responden bien a ella. Esto provoca que haya demasiada glucosa (azúcar) en el torrente sanguíneo, lo que, con el tiempo, puede causar problemas de salud graves, incluidos daños en los vasos sanguíneos.
Por otro lado, la demencia es un grupo de enfermedades que afectan el cerebro y deterioran la memoria, el pensamiento, el estado de ánimo, e incluso la capacidad de realizar tareas diarias. Entonces, la conexión entre ambas condiciones parece ser que los altos niveles de azúcar en la sangre y el daño a los vasos sanguíneos que causa la diabetes también dañan los vasos en el cerebro, lo que puede llevar al deterioro cognitivo.
Además, los niveles altos de azúcar generan inflamación, lo que afecta a las células cerebrales. Y cuando las células del cerebro empiezan a dañarse, aumentan las probabilidades de desarrollar demencia.
¿Qué tiene de especial el inhibidor SGLT-2?
La gran pregunta es: ¿por qué el inhibidor SGLT-2 parece ser más eficaz que el otro medicamento para prevenir la demencia? Bueno, aunque ambos medicamentos ayudan a controlar el azúcar en la sangre, los inhibidores SGLT-2 tienen algunos beneficios adicionales que podrían marcar la diferencia. Este medicamento ayuda a eliminar el exceso de azúcar a través de los riñones, pero también se ha descubierto que mejora la presión arterial, promueve la pérdida de peso y reduce la inflamación. Estos factores, como la obesidad y la presión alta, también aumentan el riesgo de demencia, por lo que controlarlos puede ser clave.
En resumen, parece que estos beneficios extra que ofrece el inhibidor SGLT-2 hacen más que solo mantener el azúcar en niveles saludables; también ayudan a proteger el cerebro.
Prevenir no es lo mismo que tratar
Ahora bien, es importante aclarar algo: prevenir que una enfermedad aparezca no es lo mismo que tratarla cuando ya se ha desarrollado. Aunque este medicamento pueda reducir el riesgo de desarrollar demencia, no significa que pueda curarla una vez que la enfermedad ya está presente.
Sin embargo, debido a la relación tan estrecha entre la diabetes y la demencia, algunos medicamentos para la diabetes ya están siendo estudiados como posibles tratamientos para enfermedades como el Alzheimer. Por ejemplo, el semaglutide, que es conocido comercialmente como Ozempic, ha mostrado ser prometedor. En algunos ensayos clínicos, las personas que lo tomaron tenían menos probabilidades de desarrollar demencia en comparación con quienes no lo tomaron.
¿Qué nos espera en el futuro?
A medida que seguimos aprendiendo más sobre cómo funciona la demencia y en particular el Alzheimer, también estamos viendo avances en los tratamientos. Es poco probable que exista un solo medicamento que pueda resolver todo, pero el uso de combinaciones de medicamentos, como se hace en algunos tratamientos contra el cáncer, podría ser un enfoque a seguir.
En el futuro, es posible que veamos estos medicamentos para la diabetes, como los inhibidores SGLT-2 o el semaglutide, usarse como parte de un tratamiento integral para prevenir o tratar la demencia. Sin embargo, todavía se necesita más investigación antes de que esto se vuelva una realidad.
Por Luis Arana
Créditos: ensedeciencia.com
