Proponen hasta seis años de cárcel a quienes realicen terapias de conversión en Tamaulipas
Buscan que la comunidad LGBTQ+ pueda ejercer su derecho de libre desarrollo de la personalidad sin miedo a ser violentados
El Congreso de Tamaulipas recibió la iniciativa que busca penalizar hasta con seis años de cárcel a aquellas personas u organizaciones que hagan el polémico proceso de “terapias de conversión”.
Fue la tarde del día martes 15 de octubre, en la sesión ordinaria programada a las 12:00 horas, donde la diputada del partido Morena, Guillermina Magaly Deandar Robinson compareció ante sus compañeros.
“La comunidad LGBTQ+ ha sido un grupo violentado y discriminado, sometidos a prácticas, bajo este contexto abundan diversas organizaciones que, de forma clandestina, ofrecen ‘terapias’ que prometen curar la homosexualidad o transexualidad, lo que transgrede los derechos fundamentales de las personas sometidas a las mismas”, declaró.
Esta iniciativa dicta que se impondrán de dos a seis años de prisión, además de una multa de mil a dos mil veces el valor diario de la Unidad de Medida de Actualización.
Misma que podría alcanzar los 217 mil 140 pesos como castigo máximo a quien realice cualquier tipo de tratamiento que anule o suprima la orientación sexual, identidad o expresión de género de una persona.
La legisladora apuntó que algunas entidades federativas ya han establecido la prohibición de estas prácticas, señaló los casos de Ciudad de México, Baja California Sur, Yucatán, Zacatecas y Colima.
¿Qué peligro tienen las “terapias de conversión”?
La diputada describió que estos “procesos” traen consigo lecturas obligadas de ideologías, ingesta de medicinas que tratan desórdenes neurológicos y terapias de aversión.
Añadió que pueden incluir palizas, violaciones, desnudez y alimentación forzada o privación de comida, confinamientos, medicación obligatoria, agresiones humillaciones y terapias con energía eléctrica.
“Esto conlleva una serie de consecuencias; como la pérdida considerable de autoestima, ansiedad, depresión, aislamiento social, dificultades para establecer relaciones íntimas, el auto odio, disfunción sexual, ideas suicidas e intentos de este acto, así como el trastorno de estrés post traumático, rechazo y culpa por no cambiar al finalizar la terapia”, detalló.
Concluyó que, la ciudadanía debe proteger a esta comunidad y criminalizar estos actos de violencia que causan perjuicios, “¡que viva el amor en cualquiera de sus manifestaciones!” dijo efusivamente.
La iniciativa de penalizar el polémico proceso de “terapias de conversión” hasta con seis años de prisión en Tamaulipas, en voz de la legisladora de Morena, busca apoyar a la comunidad LGBTQ+ para que pueda ejercer su derecho de libre desarrollo de la personalidad y sin miedo a ser violentados.
Por Mariela Macay
Foto: Congreso del Estado de Tamaulipas
Créditos: elsoldetampico.com.mx