Persiste contaminación hacia el río

A una semana de entrega de agua rodada, al menos 4 puntos vierten aguas negras directo al Bravo

A una semana de la fecha de ingreso a Juárez del agua del río Bravo correspondiente al tratado internacional de 1906, la contaminación con drenaje en el lecho del cauce divisorio persiste en la zona norponiente.

Cuatro flujos vertiendo aguas negras directo a la frontera fueron observados ayer en un recorrido por el bordo, a la altura de las colonias Sara Lugo y Franja del Río, mientras que en la bocatoma de la acequia Madre, por donde entra el líquido a la ciudad, había incluso animales muertos.

El mal olor penetraba también el ambiente en el sector, y lo acumulado ante las compuertas de la presa Internacional, a un costado del monumento al Nuevo Ciudadano, se observaba verdoso, mientras que varios metros del bulevar Bernardo Norzagaray, también en esa zona, permanecían mojados.

“Le habla uno a la Junta (Municipal de Agua y Saneamiento, o JMAS) y vienen nomás y meten las bombas esas que traen, hacen como que destapan y se van. Y sí destapan, porque deja de salir el agua por la alcantarilla, pero pasa un día o dos y ya está otra vez brotando”, dijo Adrián Jaramillo, de 45 años y residente de la calle Coyotla, donde una corriente de drenaje fluía al río ayer por la mañana, como otras en las calles Zapotlán, Villa Coronado y Villa Ocampo.

“Va a empezar a venir el agua, está bien contaminado; parece canal de aguas negras, no río Bravo”, agregó Jaramillo.

La problemática deriva de la falta de reparación de cuatro colectores en ese sector norponiente de la ciudad por parte de la JMAS; obra para la que, desde junio de 2022, cuenta con un financiamiento del Banco de Desarrollo de América del Norte (Nadbank) que busca, precisamente, evitar la contaminación del cauce internacional. El recurso, sin embargo, no ha sido utilizado.

Al respecto, la JMAS indicó ayer que la expectativa era lanzar la licitación para la obra de reemplazo del colector Norzagaray la siguiente semana, luego de que, desde diciembre, fue asignada la proveeduría de la tubería de ese primer tramo –de un total de 18.5 kilómetros–.

Manuel Morales, nuevo secretario de la sección mexicana de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), agregó ayer que la fecha prevista para el ingreso del recurso hídrico que entrega Estados Unidos al Valle de Juárez se cambió del 12 al 13 de marzo, y que, hasta ayer, se esperaban 39.4 millones de metros cúbicos (Mm3), o un 53 por ciento del máximo de la asignación establecida en el tratado, que es de 74 Mm3.

“Estamos viendo ese tema con la JMAS, ellos han estado realizando labores periódicas de mantenimiento y desazolve en las tuberías de alcantarillado sanitario que se localizan en las inmediaciones del río Bravo de esa zona norponiente”, dijo Morales.

“Asimismo, nos han confirmado que en breve iniciarán los trabajos para la rehabilitación de uno de los colectores principales de esa zona, el colector Norzagaray”, agregó el funcionario.

Reportan desazolve

Al margen del drenaje, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la CILA reportaron avances en el trabajo de despeje tanto de la acequia Madre, que conduce el agua hasta el Valle, como de la parte alta del Bravo, por donde entra a México.

“A la fecha se tiene registro de aproximadamente 450 metros cúbicos de retiro de azolve y basura, sin considerar la extracción realizada por parte del área de Servicios Públicos Municipales. Se cuenta a la fecha con un porcentaje superior al 90 por ciento en cuanto al área despejada para la circulación del agua del tratado”, indicó Brenda Solís, vocera estatal de la Conagua.

“Nos encontramos trabajando en el punto conocido como bóveda de Curioseros, en coordinación con personal de Servicios Públicos Municipales. Asimismo (…) se comienza a trabajar en el cruce del punto de llegada en coordinación con personal de la JMAS para, ya una vez terminados estos dos puntos, terminar con los trabajos programados para la limpieza de la acequia de este año”, agregó la vocera.

Morales indicó también que, como cada año, “en estos momentos nos encontramos realizando trabajos de limpieza y desazolve dentro del cauce del río Bravo, entre la presa Americana y la presa Internacional, los cuales iniciamos el 15 de febrero y concluyen el próximo 15 de marzo”. 

Por Sandra Rodríguez

Foto Gabriel Cardona

Créditos diario.mx

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