Hallan misteriosas estructuras en el centro de la Vía Láctea que cambiaría lo que sabemos de ella
El espacio nos sigue maravillando, de hecho, no dejamos de pensar si algún día resolveremos todos sus misterios, su vastedad es tal que todo lo que sabemos ha de ser un muy mínimo porcentaje, desde que se descubrieron las primeras minigalaxias que pudieron dar origen a nuestra Vía Láctea hasta la nova que estamos a punto de presenciar. Recientemente, un equipo de astrofísicos estadounidenses ha revelado hallazgos impresionantes y algo enredad en el centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea, que podrían cambiar nuestra visión de todo lo que conocemos como núcleo galáctico.
Hay algo que captaron los científicos y que se encuentran en el núcleo de nuestra galaxia, a una distancia de aproximadamente 25,000 años luz de la Tierra. Estas estructuras son formaciones magnéticas gigantes, se extienden horizontalmente desde el supermasivo agujero negro conocido como Sagitario A*. Estos filamentos, similares a largos tubos o radios de bicicleta, forman una especie de red que se propaga desde el centro de la galaxia.
¿Cómo se forman teóricamente estos filamentos?
En el espacio, encontramos un medio interestelar que no está vacío, sino que está compuesto por un plasma, que es un estado de la materia formado por partículas cargadas (iones y electrones). Estas partículas cargadas en movimiento generan corrientes eléctricas y, por lo tanto, campos magnéticos. Estos campos magnéticos pueden interactuar entre sí y con las partículas cargadas, dando lugar a estructuras como los filamentos magnéticos observados en el núcleo galáctico.
Los filamentos magnéticos se forman debido a la compresión y alineación de las líneas de campo magnético en ciertas regiones del espacio. Estas estructuras pueden ser el resultado de la interacción de diferentes corrientes y campos magnéticos que se entrelazan y se organizan en patrones específicos debido a las fuerzas electromagnéticas
Hasta el momento, se tenía contemplada la existencia de filamentos magnéticos en el espacio, pero estos nuevos hallazgos nos han presentado diferencias significativas en cuanto a su disposición y tamaño. Los filamentos anteriores eran principalmente verticales, parecidos a estalactitas gigantes que colgaban cerca de Sagitario A*. En contraste, los recientes descubrimientos muestran filamentos que se extienden de manera horizontal, cubriendo una mayor extensión de espacio y apuntando hacia el núcleo galáctico.
Sabíamos que el agujero negro central posee un disco de acreción con una dinámica ya conocida, pero este descubrimiento ya de por sí nos revelaría una cosa totalmente distinta. Estos filamentos, que tienen una antigüedad aproximada de 6 millones de años, no son simples estructuras aleatorias en el espacio. Más bien, parecen estar estrechamente relacionados con la actividad y rotación de ese mismo agujero negro, los expertos podrían contribuirlo a este fenómeno y expandir o refutar lo que ya sabíamos.
¿Cómo hicieron el estudio?
Para llevar a cabo esta investigación, los científicos emplearon tecnologías avanzadas de radioastronomía, específicamente el telescopio MeerKAT del Observatorio de Radioastronomía de Sudáfrica. Esta herramienta tecnológica ha sido indispensable para explorar el espacio profundo, permitiendo a los científicos revelar precisamente este tipo de descubrimientos.
Esperamos con ansia el avance de este emocionante proyecto, ya que no todos los días se ve algo novedoso en nuestro universo. Mientras los esfuerzos de los astrónomos siguen en pie, nosotros podremos ser testigos de tan tremendos secretos que todavía el universo esconde en su vastedad.
Por Joselyn Villordo
Créditos ensedeciencia.com
