Científicos descubren cómo revertir la pérdida de memoria por medio de un mecanismo oculto en el cerebro

Con el paso del tiempo, la memoria se va deteriorando, por lo que empezamos a olvidar muchas cosas. Mantener la memoria fuerte es una de las preocupaciones de muchas personas. Especialmente debido a que la pérdida de memoria no es fácilmente reversible.

Un equipo de científicos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington consiguió un avance sin precedentes en la medicina. Y es que lograron revertir la pérdida de memoria a partir de un novedoso método: rejuveneciendo el sistema de limpieza del cerebro.

El estudio se publicó en la revista Cell, y explica a detalle cómo es que el grupo de científicos ha conseguido mejorar la memoria deteriorada por la edad.

Logran restaurar la memoria deteriorada por la edad a partir de un efectivo método

El cerebro, al igual que otros órganos, produce residuos que deben ser eliminados cada cierto tiempo. Los residuos son desechados por el sistema linfático meníngeo, el cual se encarga de drenar el líquido cefalorraquídeo.

Para ello, son necesarios los vasos linfáticos, mismos que se encuentran en las meninges. Estos son los que actúan como canales de eliminación, transportando los residuos fuera del sistema nervioso central. Pero, con el paso del tiempo, los vasos se deterioran y su capacidad de drenaje disminuye.

Sin embargo, este deterioro, aunque pueda parecer algo normal, también está relacionado con la aparición de Alzheimer y otras enfermedades vinculadas a la memoria. Por lo que los científicos, con el fin de conocer si restaurar estos vasos ayudaría a revertir los problemas de memoria, llevaron a cabo un experimento.

La restauración de los vasos linfáticos mejoró la memoria en ratones

Los expertos tomaron ratones viejos y administraron VEGF-C, una proteína conocida por estimular el crecimiento de los vasos linfáticos directamente de la región meníngea. No fue necesario penetrar la barrera hematoencefálica, y tampoco fue un procedimiento invasivo.

No fue un procedimiento invasivo, pero que sí duró varias semanas. Además, se recurrió también a pruebas conductuales y análisis cerebrales. Siendo comparados al final del tratamiento con ratones que no fueron sometidos a este procedimiento.

Los resultados arrojaron que los ratones a los que se les había aplicado la proteína recordaban mejor los recorridos y objetos. Lo que revela que su memoria había sufrido una mejora evidente.

Causas del deterioro cognitivo

El sistema nervioso cuenta con otra célula inmunitaria: la microglía. Cuando detecta señales de peligro, produce señales inflamatorias. Una de ellas es la interlucina-6 (IL-6). Se descubrió que, en los ratones con drenaje linfático deteriorado, la microglía libera cantidades excesivas de IL-6.

Esto ocasiona un desequilibrio en la comunicación neuronal, lo que altera las señales excitatorias e inhibitorias del cerebro. Al mismo tiempo que las sinapsis dejan de funcionar correctamente, siendo relacionado con la pérdida de memoria, desorientación y comportamiento errático.

Tras el tratamiento, los investigadores se percataron de un cambio de comportamiento, registrando equilibrio saludable entre señales excitatorias e inhibitorias en la corteza de los ratones tratados. Al igual un mejor rendimiento en laberintos y pruebas de reconocimiento de objetos.

Asimismo, se redujo la expresión del gen Il6, que codifica la interleucina 6, el cerebro presentó una inflamación menor y revelaron una estructura sináptica más estable en los cerebros tratados. Por lo que es una vía abierta a tratamientos para restaurar la memoria sin recurrir a métodos invasivos.

Además de que será menos costosa y más segura que los tratamientos actuales, e incluso, podría combinarse con otras terapias para aumentar su eficacia. De igual manera, sienta las bases para que los ensayos se lleven a cabo en humanos.

Por David Josué Calderón Coss

Créditos: ensedeciencia.com