Camarón importado de China, Taiwán y Venezuela afecta a los pescadores de Tamaulipas
Las grandes cadenas comerciales importan crustáceo asiático generando una competencia desleal a los locales.
La entrada de camarón chino al país está afectando la economía local en el estado de Tamaulipas.
Los pescadores advirtieron que la actividad de la pesca de camarón se ha vuelto cada vez más difícil debido a los altos costos operativos y a la invasión de camarón importado de China, Taiwán y Venezuela.
“Las ventas han bajado, y como la mayor parte del camarón se dirige al mercado nacional porque ya no se exporta, enfrentamos una competencia fuerte con el camarón importado de esos países”, señaló el presidente de la Federación Regional de Sociedades Pesqueras del sur de Tamaulipas, Canuto González Miranda.
Precio del camarón cae
El ingreso de más producto al mercado ha hecho que los precios del camarón caigan, y los consumidores ahora tengan más opciones.
Por ejemplo, gran parte del producto que se vende en tiendas de autoservicio es importado de Asia y Venezuela.
“Entra una cantidad enorme de camarón a México, la mayoría de cultivo, que aunque tiene menor calidad, es más barato. La gente lo compra por el precio, y todo lo que se comercializa en grandes cadenas viene de China”, explicó.
Así están los precios en el mercado
Actualmente, el precio del camarón del Golfo de México ha bajado, vendiéndose en 130 pesos el kilo, cuando antes se ofrecía entre 180 y 200 pesos.
“El camarón importado ha obligado a productores locales a reducir sus precios. Además, con la situación económica actual, muchos consumidores consideran el camarón un lujo y optan por otros alimentos más accesibles”, agregó.
Reducción de la pesca
Esta temporada, la flota camaronera de 182 embarcaciones no pudo salir en su totalidad a pescar debido al alto costo del diésel, que supera los 24 pesos por litro.
“Para capturar 15 toneladas se necesitan al menos 40 días de trabajo, y si un barco trae menos de esa cantidad, el gasto en diésel hace que la operación no sea rentable”, explicó.
Además, cualquier problema mecánico incrementa los costos. “Hay que sumar los gastos de las artes de pesca, lubricantes, salarios y los préstamos, lo que hace que salir al mar no sea costeable”, añadió.
González Miranda informó que entre el 30% y el 40% de los barcos camaroneros permanecieron en tierra por dificultades económicas.
A pesar de esto, los pescadores esperan que la actividad mejore en lo que queda del año, aunque prevén que para diciembre toda la flota pesquera estará detenida.
Por Teresa Macías
Foto: Alejandro del Ángel
Créditos: elsoldetampico.com.mx