Arqueólogos hallan ‘por accidente’ una enorme ciudad maya oculta en la selva de México
A pesar de que la tecnología ha avanzado a pasos agigantados, aún faltan muchas cosas por descubrir y lo más sorprendente es que algunas de ellas se pueden estar escondiendo debajo de nuestros pies.
El tiempo pasa, y por el mismo motivo, es posible que el suelo que caminamos tranquilamente contenga alguna sorpresa, o que, tras esa densa barrera de árboles, se encuentre un magnífico vestigio que nos muestre la grandeza de las civilizaciones pasadas.
Como ha sucedido en un estado de México, en donde fueron encontradas más de 6 mil estructuras mayas antiguas que se encontraban ocultas por una densa vegetación, además de una ciudad con pirámide incluida a la que llamaron “Valeriana”.
De acuerdo con un estudio que se publicó en la revista Antiquity, una gran cantidad de las más de 6 mil piezas, que hasta ahora eran desconocidas tanto para el gobierno como para los científicos del país, están cerca de asentamientos humanos modernos.
La forma en la que encontraron a esta imponente ciudad fue por medio de datos que se obtuvieron con ayuda de la ténica LIDAR (Laser Imaging Detection and Ranging), en el área a estudiar, la cual se ubica en el centro-este de Campeche y cuenta con una superficie de aproximadamente 130 kilómetros.
Se menciona que el descubrimiento de esta nueva ciudad se dio “por accidente”, según los autores de la investigación.
«Nuestro análisis no solo reveló una imagen de una región que estaba densa de asentamientos, sino que también reveló mucha variabilidad», dijo el autor principal del estudio, Luke Auld-Thomas, de la Northern Arizona University, en un comunicado de prensa.
En el área de Campeche donde se realizó el análisis, se pueden encontrar bosques tropicales, llanuras de piedra caliza y humedales estacionales, además de que fue un centro neurágico de la antigua civilización maya, esto durante el periodo Clásico (250 a 900 d.C.)
«No solo encontramos áreas rurales y asentamientos más pequeños, también encontramos una gran ciudad con pirámides justo al lado de la única carretera de la zona, cerca de un pueblo donde la gente ha estado cultivando activamente entre las ruinas durante años», señaló Auld-Thomas.
Sin embargo, los investigadores mencionan que todavía “hay mucho por descubrir” en lo que se denomina las “Tierras Bajas Mayas Centrales”, que es una parte sur de la Península de Yucatán, lo que abarca partes de la actual Guatemala, Belice y los estados mexicanos de Campeche y Quintana Roo.
«Los científicos en ecología, silvicultura e ingeniería civil han estado utilizando estudios LIDAR para estudiar algunas de estas áreas con propósitos totalmente diferentes», dijo Auld-Thomas.
No obstante, Auld-Thomas procesó los datos que utilizaban los arqueólogos, y de esta manera fue que se dio cuenta de algo que todos los demás habían pasado por alto: la enorme ciudad antigua que en sus momentos de esplendor pudo haber albergado entre 30 mil y 50 mil personas, allá por los años 750 y 850 d.C.
Gracias a las técnicas de LIDAR es que se han podido descubrir zonas que de otra manera no podrían ser descubiertas, debido a que se encuentran entre densas vegetaciones, pero con esta técnica, no hay cubierta forestal que oculte ningún vestigio del pasado.
Por David Josué Calderón Coss
Foto: Especial
Créditos: ensedeciencia.com
