Científicos chinos encuentran un nuevo tratamiento que podría curar la diabetes tipo 1 por primera vez en la historia
Recientemente, fue dado a conocer un nuevo tratamiento contra la diabetes tipo 1. El descubrimiento se publicó en la revista Cell, el cual resulta muy prometedor para que las personas afectadas por esta enfermedad puedan mejorar su calidad de vida e incluso, producir su propia insulina.
De todas las enfermedades que hay y que aquejan al humano, hay algunas que son mucho más frecuentes entre la población que otras, por lo que se requiere de la invención de medicamentos o terapias que sean efectivas para combatir estas enfermedades y en el caso de unas, implementar estrategias de prevención para evitar que aparezcan, como sucede con la diabetes tipo 1.
La diabetes, de acuerdo con los Institutos Nacionales de Salud en Estados Unidos (NIH), es una enfermedad que ocurre cuando la glucosa (azúcar) en la sangre es demasiado alta. Y aunque la glucosa es esencial para el cuerpo, ya que es la principal fuente de energía, un nivel muy alto de este monosacárido puede derivar en problemas importantes de salud.
La insulina es la hormona producida por el páncreas que se encarga de ayudar a que la glucosa aporte energía a las células del cuerpo, pero cuando existe la diabetes, el cuerpo no produce insulina, es poca o no la usa en la manera que debe usarla, provocando que la glucosa se quede en la sangre y no llegue a las células.
La diabetes tipo 1 es la que se caracteriza por no producir insulina o producirla en bajas cantidades, debido a que el mismo sistema inmunitario es el que ataca y destruye las células del páncreas que producen insulina, y la mayoría de los pacientes son niños y adultos jóvenes, aunque no esta exenta de presentarse a cualquier edad.
¿En qué consiste el tratamiento para curar la diabetes tipo 1?
El tratamiento que podría curar a la diabetes tipo 1 consiste en trasplantar células del paciente reprogramadas como células madre pluripotentes inducidas químicamente y diferenciadas en células de los islotes de Langerhans, que son los encargados de producir las células beta, las cuales son responsables de generar insulina.
De acuerdo con el estudio de la revista Cell, esta fue la terapia que se le aplicó a una mujer china de 25 años que padecía diabetes tipo 1. Tras el tratamiento, esta mujer empezó a producir su propia insulina después de dos meses y medio de que se le trasplantaran sus propias células reprogramadas.
Ha transcurrido un año de ese tratamiento, sin embargo, la paciente no ha necesitado que se le administre insulina exógena, ya que, según la experta María Teresa Tusié Luna, investigadora del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM, el control de la glucosa depende de la insulina que es secretada por esas células reprogramadas.
Sin embargo, a pesar del éxito de este caso, la academia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) advirtió que se trata de un proceso bastante complejo y que el caso anterior fue un solo éxito y que los resultados de esta terapia pueden variar de paciente a paciente.
“Esta variabilidad individual debe ser estudiada con más detenimiento y rigor. Sin duda, el nuevo procedimiento contra la diabetes tipo 1 es muy prometedor, pero pueden pasar décadas antes de que entendamos todos los pasos de la manipulación de células de algún tejido y su relación con la variabilidad individual”.
“Probablemente este procedimiento funcione para la diabetes tipo 1 en el mediano o el largo plazo y después de que entendamos a cabalidad todas las posibles variaciones del proceso de reprogramación y diferenciación de células que pueden darse en distintos pacientes”, mencionó la investigadora María Teresa Tusié Luna.
Por David Josué Calderón Coss
Créditos: ensedeciencia.com