Una extinción masiva podría estarse desencadenando en los océanos, según científicos de Harvard
Si le das un vistazo a los océanos, podemos comprender que su complejidad nos basta para continuar estudiándolos todo el tiempo y que no hay razón alguna para dudar que, todavía hay secretos que NO HAN sido descubiertos. Son los que cubren la mayor parte de nuestro planeta, albergan una biodiversidad única y fundamental para el equilibrio global. Sin embargo, las amenazas ambientales, como el cambio climático, están cambiando rápidamente la jugada, pues está en riesgo toda la conservación de esta diversidad biológica. Y es precisamente, que un reciente estudio realizado por investigadores de la Universidad de Harvard nos está dando posibles señales de alerta temprana de extinción en los océanos, basadas en el análisis paleontológico de comunidades de una especie de foraminíferos planctónicos.
¿Fora…Qué?
Los foraminíferos planctónicos son microorganismos marinos que forman parte del plancton, es decir, organismos que flotan en la columna de agua y no pueden nadar activamente contra corrientes. Estos organismos son importantes componentes del fitoplancton, que constituye la base de la cadena alimentaria marina.
Lo que distingue a estas especies es su caparazón duro, conocido como test, que está formado por material calcáreo o aglutinado. Este caparazón puede variar en forma y tamaño según la especie, pero en general presenta una estructura perforada con numerosos agujeros o aberturas, a través de los cuales el organismo extiende pseudópodos para alimentarse y moverse.
El estudio
Liderado por Anshuman Swain y su equipo, se enfocó en analizar registros fósiles de foraminíferos, organismos unicelulares con caparazón duro que han existido en los océanos durante cientos de millones de años. Estos microorganismos, además de constituir una sólida base de la cadena trófica, son indicadores clave de la salud y la biodiversidad del ecosistema oceánico, pues al ocupar un lugar importante en la cadena alimentaria marina, su presencia y cambios en su población pueden afectar a toda la red alimenticia. Además, su rico registro fósil permite reconstruir la historia ambiental de los océanos y comprender cómo ha evolucionado a lo largo del tiempo geológico.
Para llevar a cabo su investigación, Swain y su equipo utilizaron una base de datos global de alta resolución de fósiles de foraminíferos planctónicos, conocida como Triton, desarrollada por Adam Woodhouse de la Universidad de Bristol. Este conjunto de datos proporcionó una visión detallada de cómo ha evolucionado la composición de las comunidades de foraminíferos a lo largo de millones de años, incluso durante periodos de cambios ambientales significativos.
Lo que concluyeron los científicos
Los resultados del estudio revelaron un patrón interesante: antes de las extinciones masivas, las comunidades marinas de foraminíferos tendían a especializarse excesivamente. Esto sugiere que la especialización extrema dentro de estas comunidades podría actuar como una señal de alerta temprana de posibles extinciones futuras en los océanos. La biodiversidad marina responde a los cambios globales del clima, especialmente en períodos de calentamiento global y tenemos la evidencia que lo respalda.
Además, el estudio destaca la importancia de invertir en la monitorización de las estructuras de las comunidades biológicas marinas para prevenir y mitigar el impacto de las futuras extinciones. La paleoinformática, un campo emergente que utiliza grandes cantidades de datos espaciales y temporales de registros fósiles, se presenta como una herramienta valiosa para comprender mejor la evolución de nuestro planeta y anticipar los efectos del cambio climático en la biodiversidad marina.
Aun así, Swain y su equipo sugieren que los métodos utilizados en este estudio podrían aplicarse a otros grupos de organismos marinos, como tiburones e insectos, para evaluar su vulnerabilidad a futuras extinciones.
Por Luis Arana
Foto ABC
Créditos ensedeciencia.com